hambriento del aroma que sopla de tus ornamentados rincones....
centrifugado por tu fuerza e impetuosa mezcla de poesía carnal....
ferozmente digiero, las letras que me sirves cargadas de pimentón....
me tiemblan los ojos....con el desahogo de tu desnudez....
bocetas tus planos, marcándome el camino a tus erógenos puntos....
la prosa de tus caderas...se pueblan de historias de erizadas pieles....